La jaula se ha vuelto pájaro y se ha volado

( Alejandra Pizarnik)

 

He violado lo inviolable
he contraído matrimonio con la muerte
y desde entonces sé que vivo
he echado raíces en personas que no volveré a ver
y brotan en mí sus semillas
he conversado de forma intermitente con estrellas
que son más fieles a la noche que la luna
he dicho “no” a sucedáneos que imitaban
la pureza o la sonrisa
he creado vínculos con la incertidumbre
y la incertidumbre me ha devuelto un jardín

he amado lo inconcreto por definición
y he definido de un modo concreto el orgasmo
he inventado palabras nuevas para personas
que ya no querían vivir
he sentido amor por alguien que sin saberlo
se dejó la vida en mi sombra
he viajado a pieles en peligro de extinción
he llorado hacia adentro todas las cascadas
del meridiano que pasa por el corazón

he plantado en mi camino estelas
con direcciones imposibles
he dudado de la única cosa que sé
porque el dolor era insoportable
he dado por sentadas cosas
que al día siguiente se han ido volando
he llevado vuestro prejuicio a cuestas
en cada país que he visitado
he contemplado la belleza jugando a ser ciega
he escalado el pozo más hondo de mi alma
hasta llegar al cielo

he sido pájaro
en un continente que levantaba fronteras
he sangrado de verde mil quejas
en hígados enfermos de ira
he pintado de blanco sonrisas
que escupían alquitrán por las encías
he revivido a cien escritores que todo un país
daba por muertos
he relamido la herida de mil palomas
he quemado todos los besos que no di
y tengo en el bolsillo cenizas

he manoseado tu nombre
y le he dado la vuelta mil veces
he visto tu cara en todos los carteles rojos
que colgaban de los edificios más tristes
he dicho te quiero sin decirlo
de forma compulsiva hasta arder
he penetrado el único orificio sin agujero:
se llamaba Mundo

y estoy viva,
tampoco me pidáis tanto.