Adiós

Cada vez que dije adiós no dije adiós. Lo cierto es que me he sentido muy extraña diciéndole Adiós a muchas personas. Adiós es una palabra muy tonta. Es una palabra que ha hecho tantísimo daño. A mí me hicieron tantísimo daño cada vez que me dijeron Adiós. ¿Qué querría decir aquel chico?, ¡pobre tonto!; me seguía amando y me dijo Adiós. Y yo le dije Adiós, Adiós. ¡¡¡Adiós, adiós, adiós!!! Sin saber muy bien lo que decía. Hubo un tiempo que me acostumbré y me sentía protegida. Como si Adiós tuviera una fuerza terrible, como si Adiós fuese un Titán o un maleficio. Un majestuoso escudo de hierro forjado en no sé que horno mágico. ¿Adiós a qué?, ¡panda de idiotas! Nos han prestado tantas cosas inútiles. Adiós es una de ellas. No sirve para mucho, pero las personas la usan para muchísimo. Es el abracadabra del amor. Unx dice Adiós y se cree que ya no ama, que se cura de sus pasiones, pero lo único que alimenta el Adiós es el desconocimiento de unx mismx.

Adiós crea unos abismos terribles y luego a Dios le piden cruzarlos. No hemos evolucionado mucho. Manipulamos la energía vital como un acróbata triste. Hay quienes se excusan, simplísimos, diciendo que gracias a Adiós han rehecho sus vidas. Yo la verdad que no entiendo tales paréntesis, esos torpes y miedosos cubículos cerrados. Si ustedes miran al cielo no ven puertecitas, ¿sí?, no les aparece a ustedes Dios con terrenos privados: “aquí amor, aquí desamor, aquí Hola y aquí Adiós: lean ustedes el manual de la bomba nuclear y la falta de autoestima. No despierten ustedes al glorioso impulso vital de la Vida. No entiendan ustedes la Vida bajo las ilustres categorías de todo lo que es nombrable”.

Tampoco el arcángel Miguel anda por ahí diciéndole Adiós a ninguna muchachita celeste. Pero miren, no sé, es que nos han repartido las cosas muy mal. El amor la primera, y la importancia personal la segunda. “Adiós, me olvido de ti, sello mi puertecita si no eres mía, si el amor es un póster al que barnizo con emociones ajenas ; antes morir ahorcado a mi ser– al que ni siquiera conozco- que abrir mi cielo. Pero sí, fe tengo y mucha, -¡para seguir negándome!-”. Y así vendrá alguien nuevx y con mi cínica sonrisa de marioneta le diré Hola, porque Hola es nuevo ciclo y Adiós es el pobre amor de mi importancia personal engrandecida.

 

https://www.youtube.com/watch?v=t-6JAmn1PxY

2 Commentarios Adiós

  1. luis 19th agosto 2019 at 10:10 am

    Me parece muy original y me ha gustado mucho.creo que llevas razón en todo. Muy bien, sigue así.

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  2. pedro 19th agosto 2019 at 10:11 am

    Magnífico texto,me ha encantado.

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