imagínate que me miraras

A veces imagino que te tengo delante, muy cerca, y me miras. Todo tuyo, me miras a mí, toda mía, con tus ojos inconclusos miras los míos inacabados. El misterio de los ojos, de tenernos con los ojos, con las ganas de decirnos, de sabernos dichos sin decir. Mirándome tan despacio como todo el tiempo del mundo, como queriéndome mirar, como sin miedo a la herida, los dos solos, en una habitación blanca. Ni frío ni calor, pero helados, pero ardiendo. Con suavidad luego, con la lentitud del insecto en la piel. Mirándome de la misma forma en que me has pensado. Mirándome como me acariciarías, como si tus ojos fueran tu boca y tus manos tu boca y tu boca tu boca… y todos tus cosas tu boca. Tu boca en la mía, anclada en mí. Y me hablarías de ciertas cosas secretas sin despegar la lengua del paladar. Me hablarías del tiempo aquel, de tu corazón frío. Me mirarías como si yo no te viera, como si estuviera a tres cuadras de ti, donde las olas, como la primavera vez que me imaginaste desnuda. Como si nunca más me fueras a hacer el amor. Imagínate que me miraras sangrando por todo lo que has callado y yo… ya no te quisiera.

1 Comentario imagínate que me miraras

  1. caterine 23rd junio 2017 at 5:58 pm

    Tu boca en la mía, anclada en mí.

    <3 <3 <3 🙂

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